Fernando Lalana, autor del libro La tuneladora, una novela negra que leímos los alumnos de 3º de ESO, nos visitó en el segundo trimestre.
Tras la presentación que realizó Iván Caño, un alumno, el autor rompió el hielo y nos dio una pequeña charla, explicando cómo impulsó su carrera como escritor, el premio Barco de Vapor y el Premio Gran Angular, hasta que en 2010 ganó el premio Cervantes Chico. Aunque confesó que los premios le ponen un tanto nervioso, sobre todo la tarea de preparar un discurso que agrade a jóvenes y adultos.
Dos moderadores, Gabriel Cárdenas y Marina López, dirigieron la rueda de preguntas que el autor contestó con gran sentido del humor. Averiguamos muchas cosas de Fernando Lalana, por ejemplo, que piensa que la inspiración no tiene ninguna importancia,y que escribir lo considera un oficio. “A los escritores, las ideas nos salen de las orejas”, nos dijo, “pero nos falta tiempo”. El trabajo, la dedicación, la experiencia, la lectura, el cine…son herramientas que utiliza para escribir sus novelas. En todas ellas, añade una pequeña dosis de humor, pues “es importante hacer sonreír al lector”.
La visita fue bien recibida e incluso Fernando Lalana firmó y dedicó varios libros. Esta experiencia nos ha permitido saber cómo es el autor y comentar ciertas dudas o curiosidades acerca de La Tuneladora.
Tras la presentación que realizó Iván Caño, un alumno, el autor rompió el hielo y nos dio una pequeña charla, explicando cómo impulsó su carrera como escritor, el premio Barco de Vapor y el Premio Gran Angular, hasta que en 2010 ganó el premio Cervantes Chico. Aunque confesó que los premios le ponen un tanto nervioso, sobre todo la tarea de preparar un discurso que agrade a jóvenes y adultos.
Dos moderadores, Gabriel Cárdenas y Marina López, dirigieron la rueda de preguntas que el autor contestó con gran sentido del humor. Averiguamos muchas cosas de Fernando Lalana, por ejemplo, que piensa que la inspiración no tiene ninguna importancia,y que escribir lo considera un oficio. “A los escritores, las ideas nos salen de las orejas”, nos dijo, “pero nos falta tiempo”. El trabajo, la dedicación, la experiencia, la lectura, el cine…son herramientas que utiliza para escribir sus novelas. En todas ellas, añade una pequeña dosis de humor, pues “es importante hacer sonreír al lector”.
La visita fue bien recibida e incluso Fernando Lalana firmó y dedicó varios libros. Esta experiencia nos ha permitido saber cómo es el autor y comentar ciertas dudas o curiosidades acerca de La Tuneladora.
Bruno Franco Spinnato
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